miércoles, 10 de agosto de 2011

Esa reunión del directorio


La semana pasada mientras nuestra capital era parte de una excelente pieza musical, nos reunimos con el directorio del club, la idea tomar nuevos aires para los nuevos tiempos...

La verdad es que fue muy grato el encuentro, como siempre nos juntamos amigos que compartimos la pasión por un mismo deporte al que podemos ir con nuestros hijos.

La cita fue en el Don Peyo de Ñuñoa, llegamos a eso de las 21:30 horas y comenzamos de una a ponerle weno, unos ají rellenos, sopaipillitas, pebre y otros amenizaron la espera, para el guerguero sour y brebajes varios.

Luego de unos minutos de conversación tocamos los puntos por los cuales nos reunimos, en breve teníamos solucionados todos nuestros problemas y el futuro se veía esplendoroso.

El problema fue cuando nos comenzó a entrar agua al bote... como será que las historias eran heavy, o sea increíbles. Imagínense que todos los que estaban ahí fueron sin duda, el mejor piloto no sólo de Chile, si no que también del mundo y que no lograron el máximo cetro mundial por "cosas del destino".

Fue tanta la emoción y fuerza de sus dichos que en un momento me di cuenta que el único weon penca era yo, el resto eran puros crack y crack de verdad, es más me amenazaron diciéndome que con una pierna me ganaban, otros que ellos fueron los primeros en el mundo en saltar 10 metros, incluso un comensal me contó que en una carrera internacional corrida en otro continente en la última recta siempre iba primero y que a metros de la meta frenaba para dejar pasar al segundo ya que él era el que punteaba... y como el amor por su país era tan grande prefería ir al sacrificio sólo para que Chile alzara el título de campeón mundial.

Estas conversaciones siguieron por mucho tiempo, y cada frase, cada palabra que salía de sus bocas me hacían más pequeño, porque de verdad eran, son y serán unos mountruos.

GIGANTES, BACANES, ÚNICOS, LEYENDAS....

Niños mi único consejo es... no tomen.

Hace mal.

Chostik



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